El descubierto bancario es una práctica muy habitual en las entidades financieras. Se trata de una opción para aquellos clientes que no tienen saldo en su cuenta pero siguen necesitando liquidez o hacer frente a distintos pagos. Sin embargo, el descubierto conlleva una serie de comisiones o intereses. Además, no siempre se podrá aplicar.
Los descubiertos en la cuenta corriente bancaria implican que esta se quede con saldo negativo. Es decir, que será inferior a cero. Normalmente se produce cuando nos pasan un recibo y no hay dinero suficiente para pagarlo.
El descubierto bancario funciona de forma similar a un crédito. Tú no tienes saldo y la entidad adelanta ese dinero. Por tanto, esta acción conllevará el pago de unos intereses y/o comisiones.
Las comisiones por descubierto tácito son, como vemos, muy comunes. Sin embargo, en los últimos años, han aparecido varias sentencias a favor del cliente, anulando estos descubiertos. Entre la razones más comunes se encuentran varias que vulneran varios artículos de la Ley General de Defensa de Consumidores y Usuarios:
Las consecuencias del descubierto bancario son el pago de las comisiones ante este tipo de deudas e intereses por dicho adelanto. Según cuál sea tu entidad, estos importes o porcentajes pueden variar. No obstante hay una serie de limitaciones o exenciones para estos cobros:
La única forma de quitar el descubierto tácito de la cuenta es abonando las cuantías. Una vez se paguen dichos importes, volverás a poner tu cuenta a cero y ya no tendrás esta deuda con la entidad.
Sí. Puedes solicitar a tu entidad, por escrito, la no aplicación de los descubiertos tácitos. Ten en cuenta que, en este caso, no podrás ni retirar efectivo ni realizar pagos si no tienes saldo. Tu cuenta nunca podrá quedar en negativo y, por lo tanto, no se podrá aplicar el descubierto.
Isbelt Martín Isbelt es graduado en Administración y Dirección de Empresas. Experto en marketing digital, tiene más de 5 años de experiencia acercando las condiciones de los distintos productos financieros a los consumidores. Isbelt se encarga de releer la letra pequeña de los préstamos, hipotecas, cuentas y tarjetas en Roams.